La Bolsa Mexicana de Valores tuvo una caída estrepitosa. El Índice de Precios y Cotizaciones (S&P/BMV IPC) cerró el jueves con un desplome de 5.81 por ciento, equivalente a más de 2 mil 700 puntos, arrastrado por las acciones del sector bancario. No se había visto una caída así desde agosto de 2011, es decir, poco más de siete años.
La principal causa de la caída fue el desplome de más de 10 por ciento de los principales grupos financieros que integran al índice bursátil, luego de que la bancada de Morena en el Senado presentó una iniciativa para eliminar el cobro de diversas comisiones bancarias, lo que limitaría las ganancias de los grupos financieros.
Bajo este contexto, Grupo Financiero Banorte, que tiene una ponderación en el índice bursátil de más de 12 por ciento, cayó 11.90 por ciento, mientras que Gentera y Grupo Financiero Inbursa cayeron 10.23 y 10.08 por ciento, respectivamente. Las pérdidas conjuntas en valor de mercado de Banorte, Inbursa, Santander, Banco del Bajío, Gentera y Regional ascendieron a 85 mil 434 millones de pesos, según datos de Bloomberg.
En la misma dirección, el FTSE BIVA perdió 5.66 por ciento, y al cierre de operaciones se ubicó en 894.52 puntos.
En un comunicado, la Asociación de Bancos de México (ABM) aseguró que analizará el contenido del proyecto de Morena con el fin de identificar sus alcances, establecer sus posibles implicaciones y dialogar con los actores relevantes.
Para Gabriela Siller, directora de análisis financiero y bursátil de Banco Base, la iniciativa de ley es una señal de que el partido mayoritario y el futuro gobierno impulsarán políticas que pueden tener efectos adversos para el sector empresarial, y a su vez resurgen las dudas sobre la toma de decisiones que se llevará a cabo en política económica.
La propuesta para eliminar comisiones bancarias fue presentada el jueves por la senadora Bertha Alicia Caraveo, a nombre del coordinador de Morena, Ricardo Monreal.
El motivo, señaló la senadora, es el cobro “excesivo”, pues solo en 2017, las comisiones generaron ingresos al sector de más de 108 mil millones de pesos, 8.0 por ciento más que en 2016. La propuesta, dijo, busca es una relación “más justa” entre la banca y las familias mexicanas.
El próximo secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, hizo un llamado a los representantes de las cámaras legislativas para que revisen los impactos fiscales de sus iniciativas.
Pidió verificar “la viabilidad” de sus iniciativas, pues “Aun cuando reconocemos que la intención de ellos (los legisladores) es tratar de mejorar la condición de vida de los mexicanos, este objetivo no necesariamente alcanza, si no se toman en cuenta tanto los impactos en las finanzas públicas, como en la estabilidad del sector financiero”.