A la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) le corresponderá contender con el poder político en un contexto en el que existen tentaciones por apoderarse de la justicia, así lo señaló el ministro José Ramón Cossío quien este jueves se despidió del máximo tribunal.
Tras advertir sobre la tentación que existe de apoderarse o destruir a la justicia constitucional en medio de una crisis de la democracia, Cossío Díaz destacó que hoy se necesitan jueces que protejan en todo momento a la Constitución.
“En esta crisis de la democracia que estamos viviendo, ¿qué le sucede a la justicia constitucional? Creo que la crisis de la democracia está trastocando la imagen general de la justicia constitucional y esto me parece peligrosísimo, porque la democracia en el apoderamiento de los órganos de Estado, está suponiendo que puede hacerse desde los órganos de Estado, lo que venga en gana que porque a final de cuentas se tiene un gobierno legítimo y mayoritario y la función central de la justicia constitucional es retener esos intentos”, advirtió.
En su mensaje expuso que cuando llegó a la Corte, la democracia mexicana gozaba de cabal salud, más allá de si alguno les gusta o no que Vicente Fox fuera el presidente de la República o que hubiera una presencia muy importante de ciertos partidos en el Congreso de la Unión.
Al despedir a Cossío Díaz, tras 15 años como ministro, Javier Laynez Potisek sostuvo que a la Corte le tocará mantener en la actualidad el sistema de pesos y contrapesos.
“Su retiro se da en un contexto en el que esta institución está llamada a refrendar su compromiso de no bajar la guardia en la protección de los derechos humanos y garantizar el mantenimiento del sistema de pesos y contrapesos en un momento en el que, según sus propias palabras, la Corte va a tener que contender mucho con el poder político y con otros fenómenos que no se habían presentado”, dijo.