La crisis por la falta de combustible, fenómeno que ha afectado a varias regiones del país en las dos semanas recientes, se hizo presente este viernes en la ciudad de León, y en todo el corredor industrial de Guanajuato.
La mayoría de las gasolineras se quedaron sin combustible y ello se convirtió en un calvario para los automovilistas.
Medios locales señalan que el desabasto comenzó desde la tarde del jueves y se prolongó durante toda la mañana del viernes en varios puntos de venta de diferentes municipios.
Las autoridades argumentaron que las razones son principalmente el robo de hidrocarburos, lo que provoca la escasez en Terminales de Abastecimiento y Reparto (TA) de Petróleos Mexicanos de cinco entidades del país: Puebla, Guanajuato, Jalisco, Estado de México y Querétaro.
Este desabasto reportado por Pemex en las TA como “intermitencia” o “suspensión permanente de Poliducto” se origina cuando la petrolera, al detectar tomas clandestinas, debe bajar la presión de los ductos o cortar el flujo de los hidrocarburos para poder reparar los daños provocados por las perforaciones de los huachicoleros.
Por ejemplo, en Puebla, la falta reportada por Pemex en su TA incluyó gasolinas Premium, Magna y Diesel.