Apple extendió este jueves a China su sistema de pagos desde plataforma móviles Apple Pay, que deberá enfrentar una ruda competencia de las compañías locales que ya dominan el mercado.
Los usuarios chinos podrán en adelante pagar sus compras con un iPhone, una tableta iPad o un reloj AppleWatch.
El presidente de la firma californiana, Tim Cook, dio la señal de largada: “Podrán comprobar hasta qué punto es fácil usarlo”, escribió en la red social Weibo, dirigiéndose a la clientela potencial de China, segundo mercado de Apple después de Estados Unidos.
El argumento podría sorprender sin embargo a los chinos, más que acostumbrados a usar medios de pago electrónicos, principalmente a través de Aliplay, de la plataforma gigante de comercio electrónico Alibaba.
Los pagos en línea por teléfonos móviles en 2015 totalizaron en China 9.310 billones de yuanes (1.4 billones de dólares), en alza de 57%, según el portal especializado BigData Research.
A mediados de 2015, unos 360 millones de internautas chinos (más que toda la población de Estados Unidos) pagaban bienes y servicios con sus smartphones, de acuerdo con datos de un centro gubernamental de investigaciones.
Alipay reivindica 400 millones de usuarios “activos” y controla, según BigData Research, el 70% de las transacciones.
En segunda posición figura el sistema del operador de internet Tancent, con apenas 17% del mercado, pero en rápida expansión entre los 650 millones de usuarios de su mensajería WeChat.
A través de esos sistemas, los chinos pueden efectuar giros entre particulares, abonar sus facturas de electricidad o pagar un viaje en taxi o la cuenta de un restaurante.
Apple publicita su tecnología de pago sin contacto y la seguridad reforzada de su sistema de explotación iOS, pero solo controla el 15% del mercado chino de los smartphones.
La gran mayoría de los teléfonos celulares en China funcionan con el sistema Android, por ende, incompatible con Apple Pay.
Los analistas creen sin embargo que podría abrirse un espacio.
“Apple Pay podría arañar una parte de mercado, pues muchos usuarios de productos Apple se distinguen por su lealtad” a la marca de la manzana, dijo a la AFP Ray Zhao, analista del sector en la correduría Guotai Junan.
La plataforma de Apple Pay funcionaba de hecho con lentitud el jueves, saturada por los pedidos de inscripción. Muchos usuarios se quejaban en las redes sociales de esos contratiempos.
Fuera de ese núcleo duro, la apuesta está lejos de ser ganada.
“Apple Pay tiene que encontrar el buen ángulo para ingresar (en el mercado chino), y no resulta fácil imaginar alguno. La competencia se intensifica, con una buena docena de rivales sólidos”, señaló el experto independiente Fu Liang.
Tancent y Alibaba protagonizaron una batalla épica, con regalos electrónicos, para ganar clientelas durante los festejos del reciente Año Nuevo lunar.