El papa Francisco exhortó a los obispos católicos de todo el mundo a hacer todo lo necesario para garantizar la protección de los niños frente a los abusos sexuales por parte de miembros del clero.
El Vaticano difundió el lunes el texto de una carta con fecha 28 de diciembre que Francisco envió a los obispos y que habla de las injusticias que se cometen contra los niños, como esclavitud laboral, desnutrición, falta de educación y explotación sexual, incluidas agresiones de parte de curas y sacerdotes.
En la carta, el pontífice deploró los sufrimientos, las experiencias y el dolor de los menores que sufrieron abusos sexuales de sacerdotes.
Se trata de un pecado que nos avergüenza, escribió el papa. Las personas responsables de la protección de los niños les destruyeron su dignidad.
Al expresar la pena de la Iglesia e implorar perdón, el papa censuró lo que describió como el pecado de lo sucedido, el pecado de no ayudar, el pecado del encubrimiento y la negación, el pecado del abuso del poder.
En este campo, atengámonos, clara y fielmente a la “tolerancia cero”, apuntó el pontífice.