Windows utiliza actualmente tres tipos de instaladores para su sistema operativo y el más popular es el .EXE. Si has utilizado el programa, seguramente te sonarán de toda la vida, junto a otros tipos de archivos como los AppX y los MSI.
Fue Microsoft quien introdujo este nuevo tipo de archivos: los MSIX que son en cuestiones generales, una amalgama de los anteriores, los AppX y MSI. Si lo pensamos en lenguaje de personas no expertas, los . EXE son más complejos, nos brindan opciones de personalización en la instalación como idiomas y rutas, así como elegir complementos.
Los consecuentes, son más directos y sencillos, entre ellos destaca el AppX que al instalarse se aíslan del SO por seguridad. Al hacerlo, tenemos la posibilidad de desinstalar con mayor limpieza los archivos. Hemos visto que los .EXE por lo general deja residuos del programa en el sistema.
Cosa que no ocurre con los MSIX, que al utilizar el principio de los AppX dejará más limpio el equipo. A esto se le suma un apoyo para hacer estos archivos compatibles con iOs, Android, MacOS, versiones anteriores de Windows e incluso Linux.
Si este cambio se concreta, para aquellos que conocen un poco del conocimiento de los equipos, podrían ver los días contados de los archivos .EXE. Habrá que acostumbrarse.
