Una fuga de oxígeno, debido a una microfisura causada por un meteorito, se produjo en una nave Soyuz acoplada a la Estación Espacial Internacional (EEI), pero sin riesgo para la tripulación, anunció ayer la agencia espacial rusa Roscosmos.
Hemos tenido esta noche una situación de emergencia en la EEI: una fuga de oxígeno y una caída de la presión. Se han tomado medidas (…) y la tripulación estadunidense, que se congregó en el segmento ruso”, declaró el director de Roscosmos, Dmitri Rogozin, citado por la agencia Ria Novosti.
Un orificio de unos 1.5 milímetros provocó un descenso de la presión, confirmó Roscosmos en Moscú.
La fisura podría haber permitido que se diera una fuga de aire de la estación situada a unos 400 kilómetros sobre la Tierra.
Las primeras investigaciones apuntan a que un micrometeorito impactó contra la cápsula, dijo a los medios rusos el director de Roscosmos, La cápsula está acoplada a la ISS y llevará de vuelta a la Tierra a los astronautas.
Rogozin agregó que “nada amenaza la vida y la seguridad de la tripulación”.