En medio de cañones de confeti, grandes multitudes de fanáticos — ahora acostumbrados al éxito de sus amados Medias Rojas — vitorearon ruidosamente al equipo mientras desfilaba por las calles de Boston a bordo de los tradicionales botes anfibios usados regularmente para pasear turistas por la ciudad.
El desfile comenzó el miércoles en el venerable estadio Fenway Park y recorrió varias de las principales calles y avenidas en el centro de la ciudad, con cientos de miles de fanáticos agolpados en las aceras. Muchos de ellos, ataviados con camisetas, sudaderas y gorros de los Medias Rojas, llegaron desde antes del amanecer para conseguir el mejor sitio posible.
Boston se consagró el domingo tras vencer a los Dodgers de Los Ángeles en cinco juegos, conquistando su cuarto campeonato de la Serie Mundial en los últimos 15 años. También se coronaron en 2004, 2007 y 2013 tras pasar previamente 86 años sin ganar un título, una sequía que fue conocida como la “Maldición de Babe Ruth”.
Los trocitos de papel rojo, blanco y azul llovían sobre la multitud en este fresco día otoñal, mientras los asistentes festejaban a los jugadores pasar en los botes, emblemáticos de la ciudad. Los jugadores y sus familias saludaron con la mano desde los vehículos sin techo.
Jarrick Fidalgo, de New Bedford, Massachusetts, fue uno de los muchos que aprovecharon que el desfile cayó en Halloween. Con una camiseta de los Medias Rojas y un gorro de esquí, presenció el desfile con la cara pintada como el Guasón, de Batman. “No ha sido más que amor”, dijo, al referirse al ambiente en las calles.
Las medidas de seguridad eran muy estrictas a lo largo de la ruta, que pasó por el lugar de los mortíferos atentados del Maratón de Boston de 2013. No se permitió beber en público. Policías uniformados estaban colocados en la ruta y agentes vestidos de civil se mezclaban con la multitud. Las calles y avenidas cercanas fueron cerradas y el estacionamiento era limitado.
“Estamos aquí fuera pasando un buen rato. La estamos celebrando, pero por supuesto todo el mundo tiene que estar seguro”, comentó Fidalgo.
Durante una ceremonia previa al desfile en el Fenway, el mánager de los Medias Rojas, Alex Cora, agradeció a los aficionados por apoyar al equipo durante lo que llamó una “temporada histórica”, en la que ganaron 108 partidos durante la campaña regular antes de vencer a los Yankees de Nueva York, los Astros de Houston y los Dodgers de Los Ángeles en los playoffs.
“Lo he venido diciendo desde el primer día: esto es de locos, esto es una locura”, dijo Cora, añadiendo que sus jugadores compartían las mismas altas expectativas de los aficionados de Boston.
“Es por eso que son campeones”, afirmó el piloto puertorriqueño.