Por el crecimiento económico sostenido que ha tenido China y su influencia financiera en el mundo, analiza implementar sanciones contra EE.UU. si este le vende armamento a Taiwán.
Ahora el Gobierno de China podría aplicar las mismas sanciones que implementó Estados Unidos (EE.UU.) entre 2010 y 2015 cuando prohibió las negociaciones con Irán.
Y es que en ese entonces, EE.UU. puso a decidir a las autoridades del país asiático entre intercambiar comercio con Teherán o con Washington.
Ahora el búmeran va en dirección a EE.UU., dado que ahora Beijing analiza las posibles sanciones, si las compañías estadounidenses venden armamento a Taiwán. De llevarse a cabo las transacciones, la nación norteamericana perdería acceso al mercado chino.
Por su parte Rusia jugaría la misma carta de la Casa Blanca para llevarlos a un terreno en el que tendrían que defenderse para preservar sus empresas.
El viraje en el orden económico mundial radica en que China asimiló su crecimiento económico y su influencia financiera, sobre todo porque las compañías líderes de varios rubros de EE.UU. realizan al menos 10 por ciento de sus operaciones con China.