Samsung Electronics estará lanzando dos actualizaciones de software para su nuevo teléfono Galaxy S8 después de que algunos usuarios se quejaron de ver las pantallas de color rojo y de conexiones irregulares de Wi-Fi.
El Galaxy S8 comenzó a ser enviado la semana pasada, y algunas personas que lo preordenaron en Corea del Sur se quejaron de la pantalla. Samsung originalmente recomendó a los usuarios arreglar el problema manualmente, pero ahora ha confirmado que permitirá a los usuarios rectificar el problema a través de una actualización.
“Samsung ha escuchado comentarios y ha decidido lanzar una actualización de software a partir de esta semana que proporcionará a los clientes una mayor capacidad para ajustar la configuración de color a sus preferencias”, dijo Samsung en una declaración por correo electrónico este lunes.
Samsung está fijando sus esperanzas en la oferta de su smartphone insignia, que se lanzó en Estados Unidos el 21 de abril, después de la debacle del Note 7 el año pasado. Ese teléfono debutó con críticas positivas solo para ser eliminado después de que algunas unidades se incendiaran y explotaran.
A diferencia del problema con la batería que afectó al Note 7, el problema que enfrenta el Galaxy S8 está relacionado con el software.
Una actualización trabajará con la incapacidad de conectarse a ciertas redes Wi-Fi de alta velocidad y esto no significa que haya un problema con el hardware del S8, dijo Samsung.
Los nuevos celulares de Samsung tienen pantallas grandes de bordes curvos y mucho vidrio pero parecen rajarse más fácilmente, según SquareTrade, una compañía de reparaciones electrónicas.
La prevalencia del vidrio en el diseño del Galaxy S8 y el S8 Plus los hace hermosos, refiere la firma, pero también “extremadamente susceptibles a agrietarse cuando caen al suelo”.
Samsung no respondió de inmediato a un pedido de comentario.