El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, convocó a sus pares de Iberoamérica a revisar opciones o mecanismos para identificar y generar un registro de personas en situación de migración.
Además, a seguir levantando la voz para rechazar el discurso de odio y xenofobia hacia los migrantes, sin importar su nacionalidad; el paso de un país a otro no debe suponer la clandestinidad y el anonimato de las personas, que impide el ejercicio de sus derechos y los deja a merced de cualquier tipo de agresión ni abuso, expresó.
Durante la Segunda Cumbre Iberoamericana Migración y Derechos Humanos: una nueva mirada, señaló que la defensa de la dignidad humana no es negociable, ni puede ser materia de transacción o moneda de cambio, ya sea en el ámbito internacional o nacional.
Indico que los flujos migratorios no se podrán detener con leyes que pretendan prohibirlos o criminalicen a los migrantes; “tampoco se podrá evitar con muros u otras estructuras que busquen aislar a los Estados y a las personas”, por el contrario, se requiere coordinación entre países de origen, tránsito y destino para establecer políticas comunes.