De confirmarse que se trata de un cráter, sería el primero que puede observarse en una de las capas de hielo de la Tierra. Un agujero de un tamaño mayor al de la ciudad de París fue descubierto recientemente en Groenlandia.
La razón por la que hasta ahora había pasado desapercibido es que se encontraba oculto bajo el hielo del glaciar groenlandés Hiawatha.
La depresión de 31 kilómetros de ancho fue descubierta cuando los científicos examinaban las imágenes de radar que obtuvieron de la base rocosa de la isla y sugieren que puede tratarse de un cráter, resultado del impacto de un asteroide de hierro de 1,5 kilómetros de ancho.
El descubrimiento se publicó en la revista Science Advances, pero el equipo detrás de la investigación, formado por personal de distintas universidades y museos de todo el mundo, todavía no ha conseguido desentrañar todos sus secretos.
“El cráter está excepcionalmente bien conservado y eso es sorprendente, porque el hielo del glaciar es un agente erosivo increíblemente eficiente que habría eliminado rápidamente las huellas del impacto”, explicó a la prensa el profesor Kurt H. Kjaer, del Centro de Geogenética del Museo de Historia Natural de Dinamarca.
Las pruebas que llevan a los geólogos a pensar que se trató de un meteorito que se estrelló contra la Tierra son los sedimentos de cuarzo que se encuentran en las aguas del glaciar Hiawatha y que parecen haber sido sometidos a una presión enorme.
Pero hay un dato importante que todavía no han podido desvelar: el momento en el que habría tenido lugar esa colisión.
Creen que pudo haber ocurrido hace tan sólo 12.000 años o hace tres millones de años, pero hasta que no consigan perforar los 1.000 metros de hielo que les permita tomar muestras del propio cráter no pueden ser más específicos, aseguran.