El mexicano Roberto Osuna será el cerrador de los Astros de Houston, equipo que milita en la Liga Americana y que hace un par de años conquistó la Serie Mundial.
“Puedo fingir y crear una competencia de mentira, y eso no gana credibilidad alguna”, dijo el manager A.J. Hinch al confirmar que el mexicano será su taponero desde el primer día de la temporada. “La transparencia es lo mejor, y tal vez la duda sobre el cerrador se puede poner en reposo”, apuntó.
Hinch utilizó a Ken Giles, el venezolano Héctor Rondón y Luke Gregerson para finalizar los partidos durante sus primeras cuatro temporadas, antes que los Astros adquirieran el verano pasado a Osuna procedente de Toronto.
“Creo que la liga ha llegado a un punto en el que se decir que alguien es tu cerrador y utilizarlo en el séptimo u octavo inning y la gente no se asusta”, consideró Hinch. “Es increíble cómo ha evolucionado el béisbol hasta que una sola palabra no signifique que tenga que lanzar exactamente en ese rol cada vez”.
Inicialmente, Houston fue cauteloso en la tarea de cerrador con Osuna tras adquirirlo en la fecha límite para canjes de la temporada anterior a cambio de Giles, el dominicano David Paulino y un jugador de ligas menores. El canje ocurrió justo antes del final de la suspensión por 75 partidos de Osuna, bajo la política de violencia doméstica de las Grandes Ligas.
Osuna fue detenido en mayo y acusado de agresión en conexión con un presunto incidente doméstico. La fiscalía retiró el cargo en septiembre a cambio de un acuerdo que exigió al mexicano mantenerse alejado de la madre de su hijo durante un año y continuar recibiendo orientación.
En el terreno, Osuna tuvo 21 salvamentos la temporada pasada, incluidos 12 para los Astros.
Osuna, de 24 años, tiene una recta que promedió 95 millas por hora (152,8 kilómetros por hora) el año anterior y también lanza una recta cortada, un slider, un sinker y el cambio de velocidad.
“Como cerrador necesitas sacar a la gente, no importa lo que hagas o cómo lo hagas”, señaló Osuna. “Siento que cuando tienes más armas y más opciones, obviamente es difícil para el bateador saber qué viene”.
En la que será su quinta temporada, el derecho está tratando de perfeccionar un sinker que le enseñó Marcus Stroman mientras fueron compañeros en Toronto.
“Todos necesitan seis o siete lanzamientos, así que si añade uno más, ¿por qué no?”, bromeó Hinch. “La diferencia entre él y muchos relevistas es que será capaz de ejecutarlo si lo siente. Si ese es el caso, será otra arma para él”.