A pesar de que no hay consenso ni en la propia bancada de Morena sobre la creación de la Guardia Nacional, en la Cámara de Diputados ya circula un proyecto de dictamen para reformar la Constitución y crear este cuerpo de fuerzas armadas y civiles que se encargarán de salvaguardar la libertad, la vida, la integridad y el pleno ejercicio de los derechos de todas las personas, protegiendo su seguridad, sus bienes, así como preservar el orden, la paz pública, los bienes y recursos de la Nación.
Los elementos que integrarán la Guardia Nacional procederán de las policías Militar y Naval, así como de la actual Policía Federal, y adicionalmente se convocará a civiles y a elementos de tropa para que se integren a la formación de nuevos elementos, los cuales recibirán formación y adiestramiento en planteles militares.
Al entrenamiento físico castrense se agregará una formación académica y práctica en procedimientos policiales, derecho penal, derechos humanos, perspectiva de género, primeros auxilios, protección civil y otros conocimientos necesarios para el buen desempeño de los elementos.
La Guardia Nacional tendrá disciplina militar en lo relacionado a su organización, pero en cuanto a las funciones ligadas al contacto permanente con la ciudadanía, se desempañará bajo medidas de autoridad civil.
Respecto a la protección de los derechos humanos y las libertades, queda prohibido que las personas detenidas en el uso de las atribuciones que establece esta reforma sean trasladadas o resguardadas en instalaciones militares.
Los miembros de la Guardia Nacional que cometan un delito o falta administrativa durante el desarrollo de sus funciones serán juzgados por el fuero civil y no por el fuero militar.
También, queda reconocida la jurisdicción de la Corte Penal Internacional, sin limitaciones ni condicionamientos. Se prevé que el dictamen sea aprobado en la Comisión de Puntos Constitucionales la próxima semana para llevarse al Pleno en breve.