El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador dijo que el proyecto del Tren Maya tendrá poco impacto ambiental, toda vez que, más de la mitad de su recorrido ya cuenta con derecho de vía del tren del Sureste, que inauguró hace sesenta años, el entonces presidente Miguel Alemán.
Luego de reunirse con el gobernador de Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas, López Obrador dijo que la entidad contaría con unos 500 kilómetros del tren, lo que representaría un tercio de la longitud del proyecto. Eso representaría entre 30 mil y 50 mil millones de pesos de inversión.
Destacó que el proyecto eventualmente podría potenciarse con una conexión a puertos de altura permitiendo un intenso movimiento de mercancías.
“Ya el gobernador de Yucatán me comentó ayer la necesidad de llevar el tren a Progreso (puerto de altura cercano a Mérida)”, advirtió el tabasqueño.
López Obrador consideró que los carros del Tren Maya podrían ser construidos en México por la empresa Bombardier, que ya tiene experiencia en surtir ese tipo de equipos al mercado mexicano.
Obrador dijo que dicha empresa tiene la ventaja de tener su planta armadora en Ciudad Sahagún, Hidalgo, y podría ser uno de los probables proveedores del proyecto férreo del sureste.
Luego, el presidente electo tuvo una reunión con los gobernadores de Quintana Roo, Yucatán, Campeche, Chiapas y Tabasco, por donde correrá el Tren Maya, para afinar detalles del proyecto.