La plataforma de formación Laboratorio de Ciudadanía Digital presentó la aplicación “Vamos a aprender purépecha”, que pretende promover la enseñanza de esta lengua del estado mexicano de Michoacán de manera amena.
Esta “app”, disponible para teléfonos móviles y tabletas, está protagonizada por un niño que guía al usuario hacia diferentes escenarios -como el mercado, la escuela o el sanatorio-, para acercar el vocabulario básico de esta lengua indígena.
“Lo que no queríamos era simplemente pasar un libro a digital, sino crear una experiencia distinta de acercarse al contenido”, explicó María Eugenia Fuentes, directora de arte de Manuvo, empresa desarrolladora de la aplicación.
La familia, los números, la cocina y el campo son algunos de los campos semánticos que abarca la aplicación, que da a conocer estas palabras en purépecha a través de imágenes y sonidos.
Detrás de las ilustraciones está el artista visual Janitzio Rangel. Son dibujos hechos a mano, con tinta y colores, menciona la ejecutiva de Manuvo.
Para la empresa era importante que el hecho de estar “interactuando con una tableta o con un dispositivo móvil no te quitara la textura y riqueza de la ilustración tradicional”, y por ello se decidió contar con un artista plástico y no uno digital.
Las ilustraciones se combinan con el texto en purépecha gracias a la editora Alicia Mateo, quien llegó a solicitar la colaboración de su familia para grabar las diferentes voces de personas que suenan en la aplicación.
A diferencia de lo que ocurrió con “Vamos a aprender mixteco”, lanzada por el Laboratorio el año pasado, esta aplicación no emplea el español y los contenidos están exclusivamente en purépecha.
El reto, indicó Fuentes, consistió en hacer que la aplicación fuera “lo suficientemente intuitiva” para que todos los usuarios se pudieran mover por ella aunque no tuvieran ningún conocimiento del idioma.
Esto resultó especialmente relevante en el caso de los niños, quienes son “nativos digitales” y podrán hacer uso de la aplicación de manera autónoma.
De cara a los próximos meses, desde Manuvo piensan lanzar otra aplicación similar, esta vez centrada en el aprendizaje del náhuatl.
Además, la empresa decidió extender su proyecto para seguir promoviendo otras lenguas indígenas y también tienen ideado desarrollar una aplicación en mapuche, para Chile.
La idea es aunar “cuantas aplicaciones móviles o digitales podamos hacer alrededor de las lenguas originarias, y siempre tratando de involucrar de la mejor manera posible a la comunidad”, aseguró Fuentes.
En México hay casi siete millones de personas que hablan una lengua originaria.
El Laboratorio de Ciudadanía Digital está promovido por el Centro Cultural de España en México, Fundación Telefónica México y Ateneo Español de México.