El gobierno boliviano decidió retirar el permiso de operaciones de la aerolínea Lamia y suspender a las autoridades del sector aeronáutico mientras se investigan las causas que llevaron a permitir el despegue del avión que se estrelló el lunes en Colombia.
La decisión afecta a las principales autoridades de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (AASANA), anunció el ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Milton Claros.
No estamos responsabilizando a ninguna persona, pero mientras duren las investigaciones vemos conveniente que los ejecutivos puedan ser suspendidos, dijo Claros.
La DGAC es la encargada de la supervisión técnica de las aeronaves y Aasana es la que aprueba los planes de vuelo.
El Ministerio de Obras Públicas ordenó, además, hacer dos investigaciones: una sobre por qué se otorgó a Lamia una certificación como operador aéreo y si cumplía todos los requisitos y la otra sobre el capital de la empresa, sus accionistas y ejecutivos.