La industria de los superhéroes está imparable; tan solo durante el 2015 se vendieron más de 98 millones de cómics. Prácticamente, los líderes de venta son Marvel Comics y DC, quienes concentran el 80 por ciento del mercado. Y es precisamente el gusto por dichos personajes lo que ha llevado que las adaptaciones de sus historias al cine sean un rotundo éxito, al registrar durante el 2016 los primeros lugares de la taquilla en México y el mundo.
Un estudio publicado en la revista “Journal of Experimental Social Psychology” sugiere que los superhéroes aumentan la autoestima de los hombres: “Tienen efectos psicológicos reales en uno mismo (…) No sólo es entretenimiento que nubla la mente. Los lazos que formamos (y formamos lazos reales) afectan cómo nos sentimos sobre nosotros mismos”, indicó la psicóloga Ariana Young, autora de esta investigación.
Otro rasgo que la especialista retoma es que los superhéroes toman la forma de nuestros miedos, esperanzas y expectativas, lo cual genera que la gente desarrolle empatía por ellos.
Para Virginia Escalante, psicóloga egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México, los superhéroes son la metáfora perfecta para enfrentar la crisis: “No es coincidencia que la primera oleada de ellos surgiera en el periodo entre guerras, durante la Segunda Guerra Mundial. Y no es de extrañar que renacieran en esta época, en la que la sociedad parece haberse descompuesto”.
Ya sea por su elenco, por los efectos especiales o porque levantan el autoestima de las personas, la realidad es que filmes como “Capitán América: Civil War” o “Batman vs Superman. El Origen de la Justicia” se quedaron con la copa de los filmes más taquilleros en México durante el 2016, según cifras de la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica (Canacine).
